Cuando la felicidad parecía asentarse en su vida, él no escribía. Más tarde, cuando todo pasaba, publicaba libros llenos de tristeza, de anhelos incumplidos, de lluvias incesantes, de indigestiones del alma.
Pero una vez no fue así. En plena felicidad tuvo deseos de plasmar todo aquello en una gran y extensa novela describiendo cada detalle: la casa cálida, los abrazos tiernos, cada reflejo de la mirada de ella, la frescura de la parra y el agua tibia del mate, sus manos suaves evitando que escriba...
Después de varios años la obra concluyó, pero el final no fue real. Nada quedó de aquello que era hermoso. Esos ojos ya no tenían en qué reflejarse y la suavidad de aquellas manos se desvanecieron en busca de atención. La parra se secó... y al día de hoy, él no toma más mates, pues nunca le gustó hacerlo solo.
Pero una vez no fue así. En plena felicidad tuvo deseos de plasmar todo aquello en una gran y extensa novela describiendo cada detalle: la casa cálida, los abrazos tiernos, cada reflejo de la mirada de ella, la frescura de la parra y el agua tibia del mate, sus manos suaves evitando que escriba...
Después de varios años la obra concluyó, pero el final no fue real. Nada quedó de aquello que era hermoso. Esos ojos ya no tenían en qué reflejarse y la suavidad de aquellas manos se desvanecieron en busca de atención. La parra se secó... y al día de hoy, él no toma más mates, pues nunca le gustó hacerlo solo.
La historia más extensa y bella del mundo igual salió a la venta. Sus lectores aún la están leyendo. Perdiendo poco a poco: la mujer, la parra y el mate.
3 comentarios:
gracias por el post, que bueno, que lo veas todo bien, creo que pasa solo en algunos computadores
saludos de chile!
Dear 77arcos,
can't see your picture...
how are you, 77arcos?
Hope you will come back soon...
■ New Link for my blog, "Cat Will" :
http://blog.roodo.com/0711
Gracias a vos Tati:) Hola Cat, ya hice el cambio. Besos
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